La famosa “piel de naranja”, que muchos confunden con celulitis, es dermopaniculosis o lipodistrofia ginecoide.

Las zonas donde aparece, tienen un tejido en forma de red que mantiene la grasa en su lugar.  A veces esta se agrupa y pasa a través de los agujeros de la red y termina viéndose así.

Los tratamientos para eliminarla van desde cremas costosas hasta masajes con máquinas que pierden su efecto una vez se terminan.

Y es que la “piel de naranja” en las piernas no se quita y no tiene cura porque no es una enfermedad como lo hicieron creer en revistas de belleza del siglo pasado.

De hecho, es tan común que más del 90% de las mujeres tienen la piel así, sin importar el tipo de cuerpo que tengan.